domingo, 12 de junio de 2011

Testigos políticos

En cualquier lugar, y más en estos tiempos de discursos de campaña política, estos seres siguen ocupando esos pequeños espacios, en donde generalmente molestan con cualquier palabra que digan. Es que ellos no tienen ningún tipo de diplomacia ni interés en caer bien a nadie.

Ocupan ese carguito que les otorga la vida por ser simplemente alguien que tiene que estar, como una excusa perfecta para los que persiguen su deseo de ser intendentes, gobernadores, diputados, concejales, o senadores. Ellos representan esa parte de las promesas que se escuchan repetirse cada vez que aparecen los micrófonos, pero se conforman con esperar la próxima, cuando haya más plata para ellos.

Ni siquiera piensan en que algo puede ser mejor, porque les da lo mismo sentarse en una silla enclenque que en una refinada y cómoda, mientras tengan algo para entretenerse en las horas en las que prefieren mantener el trabajo y la responsabilidad alejados. Sus objetivos son otros más cerca de la recreación que de la búsqueda del tan mentado bien común.

El bien para ellos es lo que satisface su ego en el momento que lo precisan, porque en realidad todo lo que necesitan es perseguir sus deseos personales, el resto vendrá cuando se les provea. El apuro no tiene tiempo más que para terminar de cumplir sus deberes. Su tiempo es para divertirse.

Pero lo más triste no es su posición descarada e ignorante, es que a ellos no les importa lo que sucede entre los de arriba, porque a los de arriba jamás les interesa que ellos estén idealmente mejor, por más que digan, redigan, e insistan en sus discursos de campaña que sus esfuerzos van a ser dirigidos hacia una mejor educación y a una mejor calidad de vida para todos.

Estos pequeños testigos que ocupan infinitos lugares, en donde casi siempre molestan, y es mejor si se mantienen callados, porque nada tienen de diplomacia y no tienen ningún interés de caer bien a nadie, están viendo, escuchando, y observando cada gesto, cada palabra, cada actitud, aunque cada político piense por ser niños no pueden entender ni ser testigos políticos.