domingo, 10 de mayo de 2009

Nadie se va a dar cuenta

Como ocurrió en la fiesta en la que sólo había botellas de agua porque todos decidieron llevar eso para tomar total quién se va a dar cuenta, así ocurre casi imperceptiblemente pero con mucho peor efecto en nuestro existir en este planeta.
Desde hoy voy tarde total está lloviendo y todos llegan unos minutos después y nadie se va a dar cuenta, hasta si no lleno las planillas hoy quién lo va a notar si ni siquiera se dan cuenta que existo, todas esas decisiones se transforman en la razón de las situaciones menos deseadas de la cotidianeidad.
Claro, el problema es que uno piensa que no se van a dar cuenta, olvidándose de las probabilidades según la muy conocida ley de Murphy. Esa que dice que cuando uno sale sin paraguas porque “piensa” que no va a llover, lo más “probable” es que vuelva empapado no sólo del agua celestial sino de los que “a propósito” pasan por el charco de al lado y salpican agua podrida hasta el iris izquierdo.
Exactamente lo mismo nos sucede cuando decidimos atrasar “unos minutos” el despertador porque está lloviendo total si llegamos unos minutos tarde al laburo nadie lo va a notar, y cuando estamos “arreglando” el reloj pensamos en la excusa que vamos a poner si “por las dudas” todos llegan temprano. Pero, al parecer, por más que cuando lleguemos “un poquito” tarde y todos los compañeros (y el jefe) desde sus puestos de trabajo nos miren con esos ojos diabólicos e insensibles a todo problema humano, diciéndonos che, qué caradura hace media hora paró de llover, nosotros no aprendemos, porque en el mismo segundo que comienza a “gotear” en otra oportunidad ya preparamos la misma estrategia.
En este punto puedo sentir los engranajes de la mente de cada uno de los que leen, diciendo sí es verdad pero yo nunca hice eso. Sí, sí, claro. De la misma manera reaccionamos cuando un sociólogo culmina su estudio y dice que la responsabilidad de la falta de un buen gobierno es de cada ciudadano, y nuestros engranajes mentales dicen sí, la verdad, si esos ignorantes aprendieran a votar como yo, este país sería otra cosa. Sí, porque yo voté por el otro. Eso comprueba que sucede, imperceptiblemente guaú, pero sucede que cuando vamos al cuarto oscuro decidimos yo voy a votar por este que me bancó cuando contrabandeaba mercadería del Brasil total quién se va a dar cuenta, y después digo que voté por ese que camina los barrios y ayuda a los huérfanos, total quién se va a dar cuenta, y ¡zas! Sale electo el menos deseado, el más impresentable, el más corrupto, y el que durante cuatro años te rompe el (¡”$·&/()!) y te tiene de rodillas como un (¡%&·”!) rogándole que te consiga esto o aquello. Y nadie se da cuenta que lo elegimos. Total después nosotros nos mandamos un discurso sobre la necesidad de educar a los chicos acerca de la democracia y saber elegir, y ponemos ejemplos de antes cuando no pasaban estas cosas, y por Dios qué barbaridad estos chicos de hoy no saben ni donde están parados, y que vergüenza estos políticos actuales que buscan su beneficio propio, porque antes por lo menos hacían sus cositas y nadie se daba cuenta. ¡Mirá! ¡Qué casualidad! ¡Como cuando llegaste tarde al laburo!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Grande! es muy ilustrativa la nota y me veo reflejado en ella cuando me duermo y llego tarde al laburo. Generalmente al mirar el despertador ya estoy pensando en lo que puedo llegar a decir para justificar mi tardanza. Con respecto al cuarto oscuro, NO ES MI CASO, desde que tuve oportunidad de votar, lo hice a conciencia y siempre viendo las virtudes de la persona a la que que iba a votar, y te soy sincero hasta ahora, todo aquel que fué favorecido con mi voto PERDIO las elecciones. No busqué jamás una ventaja personal. No creo que sea una excepción, por lo menos no debería serlo, ni quiero ser un ejemplo, pero a pesar de escrbir en forma anónima debemos creer que existen muchas personas que toman la misma actitud. Buena la nota!

Anónimo dijo...

podrias hacer un post explicando porque desde que tengo uso(no es derecho si estoy obligado no?) del voto(cosa que me abstengo hace un par de elecciones basandome en motivos geograficos)no he escuchado en las campañas mas que nombres que bardean otros nombres o alagan otraos nombres pero nunca un idea o intento de formar una politica de estado mas alla de las diferentes ramas de pensamiento que debatan el modo de llevarlas a cabo...

Anónimo dijo...

Bueno, yo no soy muy buena en politica y grandes razonamientos, pero si cada vez que leeo cosas de como se va degradando la especie humana me preocupa, soy madre y me toca a mi educar mis hijos que van a ser el ejemplo de la proxima generacion y confieso que me preocupa que sean como los chichos de hoy ni siquiera quiero que sean como yo sino mejor. Esa es mi preocupacion