lunes, 6 de febrero de 2012

La gata flora es argentina


Hace un tiempo atrás me atreví a decir que “el argentino es mujer, porque no sabe lo que quiere”, y algunos me elogiaron, otros me condenaron, algunos se rieron, y otros me apedrearon desde lejos con magnánimas rocas filosóficas, denominándome resentido, racista, sexista, y otras flores que por mucho tiempo afectaron mi sueño: antes dormía 8 horas, ahora duermo 10.

Hoy, en la lejanía de aquel atrevimiento de 2009, noté que el paso del tiempo no logró cambiar al argentino y razoné que quizás es porque tenemos algún gen de la gata Flora, pero si usted tiene ganas de ponerme algún otro apodo por lo publicado antes, le invito a leer aquella reflexión en este link http://www.lavozdecataratas.com/index.php?mod=noticia_ver&id=10802 , no se olvide copiarlo y pegarlo en la barra de direcciones.

Mientras, piense en cuántas ocasiones ha escuchado a argentinos y argentinas (hoy hay que referirse a ambos por eso de las susceptibilidades ¿vio?) contradecirse de tal manera en sus dichos y acciones que realmente desestabiliza al cerebro más firme. Para esto, usted sabrá, no es necesario alejarnos demasiado de nuestras calles iguazuenses, por donde hoy más que nunca circulan argentinos y argentinas de todas las latitudes.

Aquí, en esta nuestra querida ciudad, podemos encontrar a representantes de todas las regiones, asociaciones, grupos, índoles, maneras, y caracteres, quienes mientras callan nos hacen dudar de su origen, pero al hablar despejan nuestra duda de si son o se hacen descendientes directos de la felina Flora; y en la gran mayoría de los casos resultan ser parientes directos de ella.

La mayor prueba que nos muestran nuestros parientes Florianos es casi siempre relacionado con el tema de nuestra cultura misionera-guaraní. Los Florianos tienen la costumbre, desde su primera hora de residencia en nuestro terruño, defender a los indios con garras y dientes, y hasta nos condenan a los misioneros por no respetarlos. Inclusive al solo nombrarles a nuestros hermanos Guaraníes, los Florianos se declaran tan protectores de ellos que emociona escucharlos; pero que no se le ocurra saludarles en el idioma guaraní porque no tienen idea de cómo responderle.

Y no cometas el tremendo pecado ante los Florianos advenedizos de mezclar algo del idioma indoamericano con el sagrado español porque te tildan de ignorante. Obvio que invitarles a jugar fútbol con los aborígenes o pasar con ellos una tarde cualquiera, está fuera de todo análisis, por eso del polvo, los mosquitos, y algunas basuritas ¿vio?

Pero claro, sin duda puede usted pedir a cualquiera de los Florianos que escriba y firme un acta de apoyo a los Guaraníes ante el flagelo del racismo, la indiferencia social, y la indigencia. Estoy seguro que cualquiera de ellos redactará la nota a la perfección, mientras detrás de ellos Madonna observa sexy desde un poster, y en el ambiente suene suave algún tema de la tan profunda Lady Gaga… por eso de ser “open mind” ¿vio?

Otro gen de nuestros familiares Florianos, que resalta a leguas de distancia, es la poca tolerancia a los argumentos y pensamientos diferentes, que los propios felinos critican aceradamente de sus contrincantes. No se le ocurra decirle, por ejemplo, a la tan inteligente juventud Floriana de hoy que usted no está de acuerdo con lo que ellos predican, porque probablemente reciba algún rasguño, seguido de un fuerte ¡miiiiiááaaaauuuuuu!

Algo que provocaría que los Florianos no vuelvan a hablarle más y lo condenen al grupo de los mentes cerradas es decirles, por ejemplo, que levantar banderas del Che y de Gandhi es un poco diferente, y que ir a vitorear a Cristina –presidente de turno –o aplaudir al intendente, o disimular zalamerías al gobernador, es lo mismo que hacían con el mismo derecho los que iban a chupar las medias a Menem, en la misma plaza, pero con textos diferentes en sus banderas y pancartas,.

Y así, podría seguir describiendo genes de nuestro origen argentino Floriano, pero usted se aburriría mucho, querido lector. Entretanto, manténgase usted alerta y evite argumentar cuando nota algún rasgo de este gen Floriano, porque le resultará muy difícil comprender cómo los Florianos pueden declararse tan abiertos de mente y condenar al que piensa diferente; o demonizar al Guaraní que viste una remera de Boca Juniors mientras él está vestido como un jazzero yanqui.

1 comentario:

Anónimo dijo...

si real,molesta el aborigen alla en las calles principales o en el semaforo por la imagen del nuevo iguazu,si antes vivian en la calle y el cacique apañado en todos sus emprendimientos salvaguardadores de la cultura guarani,minnnga,el gran casino era destinatario de sus afanes conquistadores ,hastya alli llegaba su expancion de la cultura hoy se razgan las vestiduras y se quedan en su casa,y no molesten a los blancos disculpen pero ,me parece que esa es la consigna solo la imagen.